Las etiquetas en el sector del comercio son el medio ideal para informar a los clientes sobre los precios y los detalles de los productos, pero también son una herramienta para mejorar la gestión del stock en el almacén y llevar a cabo una correcta trazabilidad.
Los sistemas de etiquetado tienen un papel relevante en diversas áreas del retail —tienda, trastienda o en el almacén— y son el eje de gestión de numerosos procesos, pero el primer paso es elegir la impresora más adecuada a la medida del negocio ya sea grande o pequeño.
Elección de la impresora
A la hora de elegir la impresora, que será el corazón del sistema de etiquetado, hay que tener en cuenta las necesidades de los clientes, tanto actuales como futuras. La fase inicial de visita a la tienda o negocio es cita obligada en la que se lleva a cabo una entrevista para identificar tanto el estado actual como lo que se quiere obtener de los sistemas de etiquetado.
En esta fase, las preguntas giran en torno al método empleado para etiquetar, si es automático o manual, si las etiquetas son fáciles de escanear, si los textos están correctamente alineados…Una vez que se conocen los puntos fuertes y débiles de los sistemas utilizados y se ha detectado qué se requiere como, por ejemplo, reducción de costes, etiquetado en tienda y trastienda, etc., el siguiente paso es diseñar una solución acorde a las necesidades.
La solución se prueba en el entorno real para ver si se puede integrar con facilidad en la infraestructura tecnológica existente y comprobar si cumple con todos los requisitos que necesita el comercio.
La compra cerraría este proceso, pero hay que tener en cuenta que el comercio necesitará un soporte técnico para que el funcionamiento sea fluido y esto solo se lo puede ofrecer un proveedor consolidado con un enfoque de servicio al cliente, que cuente con una red de partners para llegar a todos los puntos de venta en caso de dispersión geográfica.
Brother, el aliado del retail
Brother con su filosofía “At your side”, pensada para estar al lado de sus clientes y partners en todo el ciclo de venta, con su enfoque de servicio y su catálogo de soluciones, es el aliado del sector retail para guiarle y proporcionarle una solución de etiquetado adaptada a cada negocio.
Brother, junto con sus distribuidores, lleva a cabo la asesoría previa, el diseño de la solución y la puesta en marcha. Una de las claves es su tecnología que se organiza en una amplia gama de impresoras de etiquetas tanto de sobremesa como portátiles.
Dentro de su catálogo destacan las impresoras de etiquetas de sobremesa de las gamas TD2 y TD4 que están indicadas para volúmenes de impresión medios y para las aplicaciones que requieren cambios rápidos, como los precios o las fechas de caducidad. Una de sus ventajas principales es que pueden enlazarse a las bases de datos, lo que automatiza la impresión minimizando la intervención del personal, para que puedan dedicarse a otras tareas que aporten mayor valor.
Otra gama destacada que aporta flexibilidad a los empleados y elimina errores con el etiquetado in situ es la de impresoras portátiles RJ. Esta serie destaca por su versatilidad, ya que se puede utilizar directamente en la tienda para el etiquetado de los productos en movilidad y para generar tickets de compra in situ, con el fin de agilizar colas de espera.
