El sector retail tiene que afrontar nuevos desafíos para adaptar su oferta y su operativa a las necesidades del consumidor actual que demanda una experiencia personalizada en todos los canales y agilidad en todo el proceso de compra tanto en la tienda física como en la online.
En este contexto, el comercio minorista tiene que incorporar soluciones tecnológicas que le permitan automatizar procesos con el fin de ahorrar tiempo, optimizar las tareas de su personal y, a la vez, reducir costes. Una herramienta que ayuda a mejorar la eficiencia y productividad son los sistemas de etiquetado que están presentes en toda la cadena de suministro, desde el almacén para la gestión del stock hasta los lineales para marcar los precios de los productos, sin olvidar la identificación de los paquetes de envío de las compras online.
A la hora de elegir un sistema de etiquetado se tiene que tener en cuenta la robustez y fiabilidad de las impresoras, el espacio donde se van a instalar, la calidad de las etiquetas, la facilidad de gestión y la capacidad de integración con la infraestructura existente.
Elección del proveedor
Una de las claves es elegir un proveedor que cuente con la última tecnología y que sea especialista. Brother es uno de ellos. Cuenta con una oferta completa que está avalada por los beneficios que aportan sus impresoras de etiquetas, que permiten la automatización de tareas y la reducción de errores. Sus impresoras se conectan a bases de datos lo que agilizan la actualización de precios con solo escanear los códigos de barras. Otra ventaja que aporta su tecnología es la compatibilidad con los principales lenguajes de impresión como ZPL2, EPL2 o DPL y con softwares tanto gestión de dispositivos como de diseño de etiquetas.
La garantía de tres años también es otra de las ventajas que facilita al usuario, junto con su soporte técnico tanto en preventa como en postventa de cobertura nacional.
Escenarios de uso
Las impresoras de etiquetas de Brother tanto de sobremesa como portátiles de hasta 4” pueden utilizarse en varios escenarios dentro del sector retail.
En almacén
Las impresoras de etiquetas de alta capacidad de producción incrementan la productividad, mientras que las portátiles crear nuevos puntos de impresión adicionales y el etiquetado in situ.
Oficina y trastienda
Las impresoras de etiquetas de sobremesa son el medio ideal para crear etiquetas de varios tipos y tamaños hasta 4”, para identificar los documentos y artículos necesarios tanto en relación a los clientes como los proveedores.
Tienda
Las impresoras portátiles etiquetan y reetiquetan precios, lo que facilita la actualización inmediata ante la llegada de nuevas promociones o cambios por la fluctuación de la demanda.
Caja
A la hora de efectuar el pago, el consumidor no quiere esperar y las impresoras portátiles con WiFi y Bluetooth agilizan la impresión de los tickets, reduciendo las colas y mejorando la experiencia del comprador.
Otros usos
En el sector de la alimentación en el que es tan importante garantizar la seguridad y la trazabilidad de los alimentos, los sistemas de etiquetado permiten cumplir la normativa y garantizar que toda la información esté reflejada en los envases. Son una herramienta imprescindible tanto en cocinas como en la comida preparada para llevar.
Un ejemplo de los beneficios de los sistemas de etiquetado de Brother es el reciente caso de uso de la óptica francesa ATOL. Gracias a la gama TD-4 ha mejorado el etiquetado de sus gafas, lo que le permite cumplir con la normativa y eliminar los errores del etiquetado manual.