1.000 millones de dólares de beneficio generados cada mes no han sido suficientes para que las ganancias netas de Intel crecieran en el complicado 2012. La marca de los motores tecnológicos ha visto como, excepto el negocio relacionado con el centro de datos, que goza de buena salud, el resto de las áreas de actividad se contraían ante las dificultades económicas. Por ello, sus ingresos anuales, que suman 53.300 millones de dólares a lo largo de 2012, se han reducido un 1,2%, mientras que los beneficios generados —11.000 millones de dólares— se han contraído un 15%. Lejos quedan, por tanto, las previsiones de hace un año que vaticinaban un ascenso de un dígito. Norberto Mateos, director general de Intel en España, tiene las explicaciones, ciertamente evidentes: “La situación económica ha empeorado, lo que también ha afectado a los países emergentes, que han crecido en los últimos años. Las inversiones de la empresa se han visto afectadas, lo que ha influido en los centros de datos que no han crecido tanto como se pensaba”. Por último, reconoció que Intel no ha aprovechado el crecimiento, enorme, del mercado de las tabletas, “en el que no contábamos con producto”. Ahora, sin embargo, ha empezado a tener presencia y ya cuenta con 10 tabletas con sus motores y Windows 8, por supuesto.
Analizando las áreas de negocio, los ingresos del área de los ordenadores alcanzaron los 34.300 millones de dólares, lo que supone un descenso del 3%. Es el área del centro de datos, que ya supone el 25% de la facturación, el que ha mantenido mejor el tipo: 10.700 millones de dólares y un ascenso del 6%. Por último, el grupo que agrupa el resto de arquitecturas de Intel suma 5.400 millones de dólares, lo que supone una contracción del 13%. “Intel ya no es una compañía de PCs —insistió Mateos—, ahora atacamos todo el entorno de la computación”.
De cara a este año recién comenzado, la previsión es crecer “a un dígito bajo”. Los servidores, eso sí, se cree que tendrán un crecimiento de doble dígito. Será el año del lanzamiento de Intel Xeon E5 e Intel Xeon E7 y en primavera llegará la cuarta generación de Intel Core (Haswell). Lógicamente seguirán apostando por los ultrabooks —“en septiembre de 2013 el 50% de estos productos serán táctiles y a final de año, la mayoría”, vaticinó— y por el desarrollo de los motores para los teléfonos inteligentes, donde llegarán los 22 nanómetros. Y en el segmento de las tabletas contarán con producto sobre Android.
Por primera vez, junto a Norberto Mateos, estuvo presente Jesús Sánchez-Aguilar, director general de McAfee en España y Portugal. El directivo resaltó que la seguridad es el tercer pilar de Intel en este momento y apuntó los diferentes campos en los que ésta se mueve: desde el desarrollo del puesto de trabajo hasta la seguridad embebida, pasando por los dispositivos móviles, el cloud y las funcionalidades en el chipset. El responsable aseguró que este año se recrudecerán los ataques a dispositivos móviles y abogó por una política de seguridad “con una gestión horizontal, completamente unificada”.
