Fiskaly, la empresa especialista en soluciones SaaS para el cumplimiento fiscal, ha alertado que ya ha comenzado a contar el tiempo para adaptar el software de facturación electrónica tras la publicación de la orden ministerial que aprueba los datos técnicos del Reglamento de Sistemas Informáticos de Facturación que contempla la Ley antifraude y sus sistemas VeriFactu.
La normativa VeriFactu, que nace de la ley Antifraude de 2021 y el proyecto de ley de 2022 con los primeros requisitos de los “Sistemas de Facturación Verificables”, obliga a que cualquier software de gestión que permita la facturación en España, garantice la integridad, conservación, accesibilidad, legibilidad, trazabilidad e inalterabilidad de los registros.
La nueva normativa afecta todas aquellas empresas y profesionales que desarrollen una actividad económica en España (excepto aquellas con sede fiscal en el País Vasco y Navarra), con una facturación inferior a los 6 millones de euros. Las que tienen una facturación mayor ya están sujetas a este control fiscal mediante el Suministro Inmediato de Información (SII), con el que Verifactu coexistirá. a todas las empresas desarrolladoras de software de facturación que operen en España. Y los primeros que tendrá que adecuar las aplicaciones son los desarrolladores de software que operan en España.
“Los requisitos legales indican que empresas y autónomos deberán emitir sus facturas mediante un software antifraude, y la ley ofrece dos modalidades de cumplimiento a escoger por el contribuyente: el modo Verifactu y No-Verifactu”, según explica Isabel Nogales, directora de fiskaly en España.
“Si eligen el sistema VeriFactu, el envío de la facturación se realizará en tiempo real a Hacienda. Será bastante similar al actual funcionamiento de TicketBAI en el País Vasco. Por su parte, en el modo No-Verifactu, al no enviar la información a la AEAT en tiempo real, se requerirá la firma electrónica y otros requisitos más complejos que garanticen la integridad de los registros. Además, deberán almacenar toda la información de facturación en el caso de que la AEAT lo solicite”, destaca la directiva.
La ley establece dos plazos para el cumplimiento con Verifactu. Primero todos los softwares de facturación que operen en España tendrán 9 meses para adaptar su software con las medidas antifraude que dicta la norma. Por tanto, los fabricantes de software y las empresas que hayan desarrollado su software de facturación internamente tienen que cumplir con los requisitos técnicos de los softwares antifraude antes del 29 de julio de 2025.
El periodo para la adaptación obligatoria para contribuyentes se definirá en las próximas comunicaciones de la Agencia Tributaria, y se espera para finales de 2025.
Fiskaly cuenta con la solución SIGN ES que se integra de manera sencilla con cualquier software de facturación o ERP del mercado vía API y facilita el cumplimiento de las diferentes normativas fiscales españolas con una sola integración.