España no está al mismo nivel que otros países europeos en la gestión de los Recursos Humanos, según señala DBM Spain, empresa especializada en la gestión del capital humano. Esta materia es vital para el desarrollo económico y nuestra competitivad, por lo que esta compañía estima que ser debe “tender a generar empleo de calidad, y para ello debemos de redefinir en el actual mercado laboral, la estabilidad laboral, incidiendo en que la formación y cualificación para el desarrollo personal y profesional de los individuos es el factor que debe dotar de esta estabilidad a éstos, a través del desarrollo de competencias que demanda el sistema productivo”.
Para lograr este objetivo ha señalado 10 puntos en los que España tiene que aprender de Europa. El primero es formular una estrategia de país, ya que a juicio de esta compañía no sabemos que es una estrategia de país.
El segundo aspecto es la profesionalización de los Recursos Humanos ya que aquí más en más del 50% de las empresas el director de Recursos Humanos no pertenece al comité de dirección.
El tercer punto es sistematizar la evaluación del desempeño, ya que en muchos países europeos se vincula la retribución variable a objetivos, mientras que en España solo lo hace el 30% de las empresas.
El cuarto punto es el desconociomiento de lo que es el outplacement —ayuda a la recolocación—, frente a muchos países europeos que lo obligan por ley.
En quinto lugar se sitúan las medidas especiales para bajas de maternidad que se implantan en muchos países europeos, mientras que en España se consideran un problema.
El sexto punto que se tiene que aprender es que en Europa no se cuestiona la igualdad de las mujeres y aquí se piensa en cuotas.
Las políticas de conciliación, el cambio de residencia y la transparencia del mercado laboral son los otros tres puntos que se deben cuidar.
Finalmente, el décimo punto que nos diferencia de Europa es que no se incentiva ser autónomo, freelance o empresario; todo se considera relación laboral encubierta.
