En los últimos dos años, todos los sectores de actividad han visto cómo sus procesos han evolucionado drásticamente, una evolución que era necesaria si se quería sobrevivir en un mercado cada vez más competitivo. Entre esos sectores se encuentra la industria Horeca, que también se vio obligada a subirse a esa acelerada transformación digital que irrumpió a principios de 2020.
A esto se le añade que el sector de la restauración tiene la particularidad de llevar a cabo unos procesos muy sensibles, sobre todo las tareas que se realizan en cocina, que si carecen de precisión, trazabilidad y eficiencia podrían tener una repercusión en la salud de los clientes.
Por todo ello, el sector Horeca se ha visto obligado a digitalizar los procesos con el uso de tecnologías avanzadas en el terreno de la identificación y etiquetado. Un claro ejemplo lo vemos en la cadena de restauración española Burro Canaglia que, debido a su rápida expansión, necesitaba optimizar sus operaciones en cocina. Optó por Brother y el asistente digital inteligente Andy para automatizar los procesos de etiquetado y la digitalización de sus registros, en pro de un correcto APPCC, con el cual consiguen reducir el riesgo de cometer errores e incrementar la eficiencia en los procesos, algo que resulta fundamental para proteger la salud de los consumidores.
Control y ahorro
El despliegue de esta solución avanzada, como la implementada por Burro Canaglia —consistente en una impresora de etiquetas autónoma y un software— ha puesto de manifiesto que las cadenas de restauración requieren unificar los procedimientos. De esta manera es posible controlar, en tiempo real, y desde cualquier dispositivo, todo lo que pasa en sus restaurantes, centralizando así las operaciones y experimentando importantes ahorros de costes de impresión de etiquetas y mantenimiento, así como importantes ahorros de tiempo —vs los procesos de etiquetado manual— para que los empleados puedan centrarse en otras funciones que son más críticas para el negocio.
Todo esto hace que la toma de decisiones sea mucho más fácil —al estar basada en datos fiables— y más rápida, al evitar tener que comprobar la información de cada restaurante de forma individualizada. Así, se eliminan desplazamientos innecesarios y la ejecución de tareas manuales, que serían mucho más lentas y costosas, además de susceptibles de errores irreparables, que la restauración no se puede permitir.
En definitiva, el sector Horeca también ha experimentado una profunda transformación del negocio, ya que ha evolucionado gran parte de sus procesos a través de una fuerte apuesta por tecnologías que se han convertido en “imprescindibles”. Es el caso de las herramientas de etiquetado automático sin las que resulta imposible, no solo tener éxito, sino sobrevivir y mantener un ritmo estable del negocio.
Álvaro Berdejo, responsable de la División de Etiquetado y Movilidad de Brother Iberia
Artículo publicado en la edición 2022 del “Especial Horeca 2022”
