Las empresas del sector retail están concienciadas sobre las ventajas en la transformación digital; ya que más del 90 % afirma tener una estrategia digital definida, pero pocas empresas han comenzado las acciones para llevarla a cabo.
Estos datos se desprenden de la encuesta The Digital Transformation PACT, promovida por Fujitsu y realizada a una muestra de 189 compañías del sector retail para analizar los elementos estratégicos necesarios para una transformación digital con éxito: personas, acciones, colaboración y tecnología (PACT).
El principal motivo por el que no se han iniciado las acciones para llevar a cabo la transformación digital se debe al miedo al fracaso. El 70 % de los encuestados afirma que invertir en acciones sin tener un retorno claro de la inversión ralentiza la puesta en marcha de la estrategia de transformación digital. El 20 % afirma haber experimentado al menos un proyecto de digitalización fallido en los últimos dos años, con un promedio de coste de 337.381 euros, y el 23 % aseguran haber cancelado proyectos digitales incurriendo en una pérdida medio de 182.321 euros.
A pesar de estas circunstancias, la mayoría espera obtener beneficios operativos en sus proyectos de digitalización en los próximos 18 meses. Teniendo en cuenta en esta previsión, el 86 % confía en que existe una cultura de innovación en sus organizaciones y cree que los procesos y comportamientos son el factor más importante para llevar a cabo sus estrategias digitales (34 %) seguido por las personas (24 %).
La encuesta de Fujitsu también destaca que la falta de habilidades digitales es la principal área de mejora para el retail (71 %). Al mismo tiempo, otra de las preocupaciones de los retailers es su capacidad para adaptarse a las nuevas tecnologías como la inteligencia artificial.
Muchos retailers están resolviendo estos problemas mediante la colaboración abierta. El 87 % está tomando medidas para aumentar su acceso a la experiencia y habilidades digitales, así como a la inversión en colaboraciones con terceros expertos tecnológicos, clientes y start-ups. Sin embargo, en comparación con otros sectores este sector es el menos dispuesto a emprender proyectos de co-creación con otros socios.