Giesecke & Devrient (G&D) facturó 1.800 millones de euros, lo que significa un crecimiento del 10 % respecto al año anterior, en su año fiscal 2012. En este ejercicio sus beneficios antes de intereses e impuestos (EBIT) ascendieron a 95 millones de euros y los beneficios netos fueron de 39 millones.
La compañía ha incrementado sus inversiones en I+D un 11% hasta los 128 millones de euros para abrir nuevas oportunidades de negocio. Y durante el año invirtió 141 millones en total.
“Hemos conseguido aumentar nuestro volumen de ventas en todas nuestras unidades de negocio y hemos reforzado las inversiones en mercados de gran potencial de crecimiento”, explica Karsten Ottenberg, director general de G&D. “También hemos experimentado una fuerte presión sobre los márgenes, sin la cual nuestros beneficios habrían superado los del año anterior”.
Con el fin de incrementar la rentabilidad ha puesto en marcha un plan global que con el objetivo de mejorar sus resultados en unos 60 millones supondrá la supresión de 400 puestos de trabajo —125 en Múnich—.
