Desde hace dos años la economía mundial, y en concreto la europea y la española, están atravesando momentos muy delicados. Cuando todo parecía indicar que veíamos una luz al final del túnel en la crisis de la covid-19, el conflicto de Ucrania y la invasión rusa nos ha devuelto a la casilla de salida. La inflación desatada y la crisis de materia prima, entre otras cuestiones, ha supuesto un duro golpe para la sociedad y la economía.
Es de sobra conocido que la primera crisis, la relacionada con la covid-19, supuso un duro golpe a muchos sectores productivos, entre ellos, el sector Horeca. Las sucesivas restricciones, la crisis de consumo y la falta de horizonte claro en la salida de la crisis hizo que el sector estuviera herido de muerte durante muchos meses. Por todo ello, las instituciones se pusieron en marcha con un ambicioso plan de rescate, a través de los planes europeos, que pudieran paliar la situación del sector Horeca, entre todos. En este sentido, los fondos NextGenerationEU han supuesto, sin duda, un bote salvavidas para muchos hoteles, restaurantes, empresas de catering y asociaciones del sector de nuestro país.
Además, el sector Horeca se está adaptando, en un tiempo récord, a un nuevo (triple) paradigma: la transformación digital, la reconversión medioambiental y los nuevos hábitos de consumo suponen para el sector un auténtico reto para el futuro. En lo que respecta a la adaptación digital, se trata, sin duda, de una de las que mayor impacto tiene sobre el sector: no solo es necesario adaptarse a las nuevas formas de operar de los principales actores del mercado, sino que se hacen necesarias importantes inversiones que permitan adaptar los sistemas a las nuevas realidades: competencias digitales, nuevos lenguajes de la tecnología, etc.
Kit Digital
Por todo ello, y en lo que respecta a nuestro país, se están desarrollando importantes iniciativas para adaptar el sector al mundo digital. Una de ellas es el Kit Digital. Se trata de una iniciativa que tiene como objetivo favorecer la implantación de soluciones digitales en los comercios a través de importantes ayudas para el sector. Es, sin duda, una necesaria iniciativa que brinda la posibilidad al sector de adaptarse a la digitalización.
Si bien es un buen punto de partida, el Kit Digital debería contemplar la adaptación a los nuevos requisitos fiscales. En este sentido, las administraciones públicas deberían propiciar una verdadera digitalización a través de la adecuación de los requisitos de software y hardware en el marco de las ayudas. Solo así conseguiremos que el sector se adapte mejor al proceso reglamentario, se ayude a reducir los costes de las declaraciones tributarias, se reduzca el fraude fiscal y se adapte a las necesidades digitales de los clientes. Basta con mirar ejemplos varios que nos rodean en otros países de la UE para entender bien este paradigma y sacar ventaja de este buen momento para una implementación segura y definitiva.
En definitiva, la verdadera digitalización supone un esfuerzo de ayudas y planes que abarquen todos los ámbitos de actuación. Solo así conseguiremos cumplir el lema del Gobierno en relación con la salida de la crisis; que nadie se quede atrás.
Xavier Aliaga
Head of Business Systems & Retail de Epson Ibérica
Artículo publicado en la edición 2022 del “Especial Horeca 2022”