La Confederación Española de Empresas de Tecnologías de la Información, Comunicaciones y Electrónica (CONETIC) lleva más de una década trabajando por el sector tecnológico y la digitalización de las pymes. Esta misión y su conocimiento de las debilidades y fortalezas del sector le han convertido en el mejor notario de la realidad que han vivido las empresas tecnológicas en los últimos meses. Gloria Díaz, gerente de la entidad, explica que, ante la crisis provocada por la pandemia de la covid- 19, el sector tecnológico ha sufrido como todos los sectores, aunque ha dado una buena respuesta a la sociedad. Ahora el sector se recupera y reivindica el papel de la tecnología como motor de la reactivación económica.
CONETIC (Confederación Española de Empresas de Tecnologías de la Información, Comunicaciones y Electrónica) lleva 14 años defendiendo los intereses del sector tecnológico y trabajando por la competitividad de las empresas que representa. Su misión también es que “la tecnología se acabe viendo como una “utility” más por otros sectores y que vean las ventajas que aporta”, según explica Gloria Díaz, gerente de entidad. Desde esta posición, que también tiene un componente de formación para cerrar la brecha digital en la sociedad, conoce de manera detallada la evolución del mercado tecnológico en los últimos meses y el impacto que la crisis de la pandemia de la covid-19 ha tenido en las empresas TIC. “Consideramos que lo peor ya ha pasado y estamos en una recuperación lenta”, indica Díaz.
Las empresas TIC ante la covid-19
La confederación realizó un barómetro el pasado mes de abril para comprobar cómo estaban afrontando la situación las empresas y pudo conocer de primera mano el efecto que producía esta situación en sus negocios. La diferente tipología de las empresas que representa suponía diferentes impactos, pero la nota común es que en todos los casos la pandemia afectaba. Las empresas de servicios, sobre todo las enfocadas al cloud, “sufrieron” menos e incluso se disparó la demanda de determinados servicios digitales y de los dispositivos para implantar el teletrabajo, aunque otras se vieron más afectadas. Además, muchos proyectos se paralizaron, pero no se han suspendido ni rescindido esos contratos. “Esto nos hace pensar en positivo”, resalta la directiva.
En ese momento, el análisis revelaba que la facturación del año se iba a reducir entre un 10 y un 20 % por término medio, pero es posible que ahora ese porcentaje sea mayor por la incertidumbre que produce la posibilidad de una segunda oleada de la pandemia que pueda volver a paralizar la actividad.
Según los datos recogidos en el barómetro, en abril el 43,2 % de las empresas del sector TIC señalaba que la crisis de la covid-19 tendría un impacto negativo en su negocio, aunque con los datos actuales este porcentaje sería mayor porque muchas empresas han tenido que optar por la fórmula del ERTE para sus plantillas. “El 90 % de las empresas va a terminar el año con un resultado inferior al que tenían estimado”, apunta Díaz.
A pesar de esto, las empresas tecnológicas han podido afrontar la demanda durante la etapa más crítica, prestando un buen servicio a sus clientes y poniendo a disposición de la sociedad y del sector sanitario diferentes recursos. La directiva recuerda que las empresas tecnológicas contaban con las herramientas para seguir adelante, aunque tuvieran que incrementar determinados recursos.
El empleo que se perdió al principio con la puesta en marcha de los ERTE -una de cada tres empresas recurrió a esta fórmula-, se recuperará e incluso “seguirá creciendo y se seguirán demandando perfiles profesionales que no tenemos”, destaca.
En este sentido, la confederación mantiene una intensa actividad para atraer talento y reclutar nuevos profesionales para cubrir los nuevos puestos de trabajo.
El 41,5 % de las empresas tecnológicas también optaron por recurrir a la financiación externa en la primera etapa de la crisis. Este aprovisionamiento de fondos, requerido por la situación, se efectuó mediante las líneas ICO de financiación y, a juicio de la directiva, “ha sido un instrumento de financiación positivo y se ha utilizado para tener un respaldo”.
Este apoyo no revela una debilidad financiera del sector, pero sí que ha sido necesario para paliar los efectos de la incertidumbre y asegurar la continuidad de la actividad.
Las medidas que el Gobierno puso en marcha para ayudar a las empresas fueron positivas, pero la confederación sigue reclamando que se prolonguen hasta que se recupere la normalidad.
Plan de digitalización
CONETIC sigue reclamando que se ponga en marcha un plan de digitalización de la sociedad española como la principal medida para ayudar al sector tecnológico e impulsar el desarrollo económico. “Echamos en falta un plan de digitalización de la sociedad española que ponga en el centro a la empresa tipo que tenemos, que es una micropyme. Hay que hacer un plan de ambicioso de digitalización”.
A pesar de esto, CONETIC considera que el programa “Acelera pyme”, que ha lanzado el Gobierno, a través de Red.es, para ayudar a las pequeñas empresas a afrontar la situación actual provocada por la pandemia es una medida positiva. Este plan, que se articula en una plataforma web, tiene una dotación económica de 250 millones de euros que se repartirá entre diferentes programas para captar talento e impulsar la transformación digital y el desarrollo de nuevas tecnologías.
La confederación cree que no se debe desaprovechar esta oportunidad y avanzar porque la digitalización beneficia tanto al sector tecnológico como a otros sectores productivos y no se debe volver a la situación anterior a la pandemia.
En su papel de representante de compañías, que en su mayoría son pequeñas, conoce muy bien la problemática de este tipo de empresas y, aunque las tecnológicas sí que han abordado la digitalización y entienden que la transformación digital es un cambio, que afecta a la cultura de la empresa sigue elevando la voz para que este proceso llegue a todas las pymes. Según señala Díaz, “se tiene que hacer un plan de digitalización con los sectores. Cada sector es distinto y tiene una serie de carencias diferentes”.
Esta aproximación sectorial y en clave de pequeña empresa es la base para lograr un plan de digitalización exitoso. Esta reivindicación también la ha llevado a las instituciones europeas, a través de su participación en European Digital SME Alliance (SME), solicitando que se incremente el gasto global en el ámbito digital dentro del presupuesto de la Unión Europea y se reoriente el Programa Europa Digital. La gerente de la organización explica que se ha escuchado esta petición en el Consejo Europeo, pero todavía no se sabe si va a hacer efectiva. “Europa es una realidad de pymes, pero son muy distintas de unos países a otros. En España tenemos que trabajar por el crecimiento de las pymes, que es necesario, porque son más débiles cuanto más pequeñas son”, asegura.
El ritmo de digitalización de las pymes es muy lento y hay que dedicar recursos para acelerar este proceso. A juicio de la confederación, los planes como el “Acelera pyme” son positivos, pero se necesita un plan más ambicioso con una duración mayor, que sea eficaz y eficiente, y que cada sector se apoye en las empresas tecnológicas para logar su transformación digital.
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