La campaña de Navidad supone un incremento de la pérdida desconocida en el comercio del 16 %, según indica el “Estudio sobre la pérdida en el sector minorista en la campaña de Navidad 2016″, que ha realizado el analista Ernie Deyle con el patrocinio de Checkpoint Systems.
El informe, que analizó los datos de 13 países, indica que la campaña entre octubre y diciembre es la que concentra más ventas y, al mismo tiempo, la que registra más pérdida desconocida. En el caso de España, el estudio prevé un aumento de las ventas del 39 % respecto al resto del año, pero el incremento de la pérdida en un 16 % disminuirá las ganancias. Ademas, el último trimestre concentrará el 37 % del total de la pérdida desconocida anual.
David Pérez del Pino, director general de Checkpoint Systems en España y Portugal, explica que “el aumento dramático del índice de la pérdida en Navidad se explica por el tipo de producto que está expuesto en las tiendas, que en esta época es de mayor precio y, por lo tanto, aumenta el valor de las pérdidas, así como por la variedad de artículos que están en exposición. También hay que tener en cuenta que hay más visitantes en las tiendas y que algunas personas ven justificado el hurto si es para hacer un regalo a un familiar”.
El estudio prevé que España sea uno de los países de Europa en los que los comerciantes aprovechen mejor el impulso de la Navidad. Después de Bélgica, España será el país que mejor controle el aumento del hurto que se da en esta temporada.
Checkpoint Systems también avisa de que es necesario mejorar los procesos que pueden dañar las ventas como pueden ser la cancelación de las transacciones, la modificación de los precios, los descuentos, los cupones, el IVA que pueden deducirse los turistas, el rechazo de tarjetas de crédito, los reembolsos, etc. Estos procesos crecen un 14 % en Navidad.
La compañía propone una serie de recomendaciones para mejorar y reducir costes. Una de las claves es encontrar el equilibrio entre la rentabilidad y el crecimiento en un contexto multicanal. Para conseguir este equilibrio aconseja el uso de herramientas de análisis de datos y estrategias de gestión de inventario junto con tecnologías como la RFID que proporcionan una visibilidad total de la mercancía a lo largo de la cadena de suministro, desde los centros de distribución y las trastiendas hasta los estantes de los comercios.
Además, recomienda mantener los estándares operativos del resto del año, ser precisos en cuanto a las expectativas económicas, planificar los pedidos de artículos de temporada, invertir en tecnología como la EAS (Protección Electrónica de Artículos) y formar a los empleados para que hagan frente a las complejidades de la campaña navideña.